VECINOS DE LA CIUDAD, SON VICTIMAS DE LOS DELINCUENTES Y EN ESTA OPORTUNIDAD, UNO SE HIZO PASAR POR CORTADOR DE PASTO PARA INGRESAR A UNA VIVIENDA Y LLEVAR A CABO UN ATRACO, QUE FUE INTERRUMPIDO POR LOS GRITOS DE UNA VECINA.
Lamentablemente, siguen los hechos delictivos en nuestra ciudad y los vecinos se siguen manifestando en las diferentes redes sociales, hace unos días atrás, una joven fue asaltada esperando el colectivo y un abuelo fue engañado con el cuento del tío.
Vecinos de la ciudad siguen preocupados por los diferentes hechos delictivos que se suceden a diario en nuestra ciudad, donde no se distingue ni edades, ni sexo y se llevan a cabo a cualquier hora del día, con una impunidad que asombra y preocupa.
El pasado viernes, alrededor de las 12 del medio día, una joven estaba en la garita de la parada de colectivo ubicada en la calle Santiago del Estero y Larroca, cuando de repente fue sorprendida por un individuo que bajo de un auto vw gol negro y le robo su celular, para luego darse a la fuga.
Lamentablemente, los estudiantes son unos de los mas apuntados por los delincuentes, ya que padres y alumnos de la escuela media Nº 1, ubicada en la calle Colon y Pueyrredon y de la secundaria Nº 7, ubicada en la calle Alte Brown y Francia, son asaltados continuamente, mas en los turnos vespertinos.
Y debido a esto, la comunidad educativa de esa zona, solicita que las autoridades tomen cartas en el asunto y envíe mas móviles policiales a la hora de ingreso y egreso de los alumnos a estos establecimientos educativos de la ciudad de Garín, donde acuden un número importante de estudiantes.
Hoy, alrededor del medio día, un vecino de la ciudad fue engañado por una persona, haciéndose pasar por cortador de paste, para robarle diferentes elementos de su propiedad, el delincuente golpeo en la casa de un vecino mayor de edad, que vive sobre la calle 18 de julio, diciéndole si necesitaba alguien que le corte el pasto, este vecino que se encontraba solo en su domicilio, accede al requerimiento de este hombre y lo deja entrar, «para que le corte el pasto», pero lejos estaba de realizar esa actividad el individuo.
Una vez dentro de la vivienda, el malviviente reduce al abuelo, que repetimos estaba solo, y lo encierra en un dormitorio de la casa, para comenzar a apoderarse de diferentes elementos de la vivienda, pero esto fue advertido por una vecina que comenzó a gritar y el mal viviente se dio a la fuga, llevándose solo un teléfono celular y un inalámbrico.