ROBARON LA MOTO DEL RESPONSABLE DE ESTE MEDIO, PERO INDIGNO MAS LA FALTA DE RESPUESTA DE ALGUNOS POLICÍAS QUE EL ROBO MISMO.
En el día de ayer, lamentablemente le robaron la moto al responsable de este medio, pero lo que más indigno es la respuesta de algunas personas que están para dar respuesta al ciudadano en momentos de mucha impotencia cuando pasan este tipo de hechos.
Ayer alrededor de las 16 hs. me encontraba realizando el reparto del periódico impreso de EL GARINENSE, cuando llego al Gimnasio ENERGYM, por lo que dejo la moto en la puerta del mismo, con la confianza de que a metros se encontraban tres numerarios de la policía comunal, deje el casco y una bolsita con un pan lactar que una vecina siempre me obsequia.
Subí al lugar y empezamos a charlar con Diego Álvarez, y como hacía mucho tiempo no nos veíamos, la charla se prolongo por cosas que tienen que ver con Garín, como lo hago con muchos vecinos, y paso el tiempo sin darnos cuenta, cuando suben al lugar dos policías comunales, preguntando por una persona de camisa y gorrita que habría subido al Gym.
Al lugar no subió nadie, fue la respuesta, pero una joven que estaba haciendo ejercicios en el lugar, comento que vio a un chico en la escalera, pero no subió al salón, solo se asomo, fue cuando me di cuenta que me habían robado la moto, ya que seguro el sujeto se asomó para ver si no bajaba nadie y al ver que nadie salía del lugar se apodero de la moto.
Los policías fueron alertados por una vecina, que conoce al joven y que según ella siempre está dando vueltas por el lugar para robar y hacer arrebatos y al verlo subir alerto a los efectivos, que llegaron luego de consumado el hecho, al bajar, constato del robo de mi moto, una Gilera 70 cc verde muy conocida por los vecinos que a diario me ven circular con ella, ya que es mi herramienta de trabajo.
los tres efectivos, repito de la policía comunal, llaman con gestos a un móvil de la misma policía que se encontraba a unos cien metros del lugar y no venia, por lo que Diego les dice «allá hay un móvil llamalo» «si lo estamos haciendo» respondió uno de ellos, a lo que Diego de nuevo le dice «pero no viene» esta el semáforo en rojo» fue la respuesta de los policías, ahí empezó mi indignación y bronca, porque los están llamando por una emergencia, pone las balizas y salí para el lugar.
Al llegar el móvil, el único de esa policía que hay en la ciudad, le informo lo que sucedió, las características de la moto, me pregunta cómo estaba vestido y le respondo que no sabía, pero ellos si, por los tres policías a los que la vecina le describió al delincuente, le digo «me subo y te acompaño para ver si la vemos, se fue por la Bourdet» y me responden “no está bien” y arrancan.
Una persona creería que el móvil fue por donde le dijimos que se fue el delincuente con la moto, pero NO, siguió por el Boulevard como si nada, allí fue el punto máximo de mi indignación y vino a mi mente cuando los vecinos me dicen «le dijimos a la policía que se fueron para allá y agarraron para el otro lado», a lo que le digo a los tres que estaban allí «pero se va para otro lado» y me dicen sueltos de cuerpo, «tiene que ir a hacer la denuncia», estaba a unas 10 cuadras de la dependencia policía, no se ofrecieron a llevarme para agilizar el tema, mi indignación subió al 100 %.
Debido a la pobre respuesta de la policía comunal, me comunico con el Sr. Torrentes, quien era el responsable del destacamento de Prevención Comunitaria de Cabot, digo era, porque me comunico que hace unos días atrás le dieron de baja y no le renovaron el contrato, quien a pesar de eso, se comunico con la base para dar aviso de lo que había pasado, es una actitud de destacar, quien podría haber mirado para otro lado, pero no lo hizo, lamentable que esta gente no tengan lugar en la función publica.
Los dejo a los «policías» tres en el lugar y tome para la Bourdet para seguir con mi reparto porque el lector no tiene la culpa de lo que me paso y tiene que recibir el periódico como siempre, justo cuando me cruzo con un móvil de prevención comunitaria, al que le informe lo sucedido y justo en ese momento estaba recibiendo la alerta de la base de Prevención que gracias al Sr. Torrente, no pasaron cinco minutos de mi comunicación con él, fue alertado de lo sucedido, y doblo para ir hacia el lugar desde donde venia, esa es la respuesta que un vecino espera de las fuerzas de seguridad, contención y rápida respuesta.
Quiero agradecer a Diego Álvarez, quien me prestó su teléfono para llamar a torrente y que de inmediato subió a facebook lo sucedido, a la bicicleteria Di Maio, del barrio la Madrugada, quien me prestó una bicicleta para poder seguir con el reparto, de una forma rápida, y a todas las personas que por medio de facebook, washapp, mensajes de texto o personalmente se ofrecieron a colaborar conmigo, por eso el dicho dice «No hay mal, que por bien no venga»
Alguien por ahí me dijo, seguro no te conocieron por eso no actuaron rápido, y mi reflexión es la siguiente, por suerte no me reconocieron, son policías nuevos, porque no quiero que me den respuesta a mi porque me conocen, quiero que me den respuesta como vecino que quiere autoridades de seguridad eficientes y profesionales, no que estén en grupos a cincuenta metros de donde se produce un ilícito y no se den cuenta, quiero como ciudadano que cualquier vecino sea contenido por los efectivos, por eso por suerte no me conocieron.
Cuando estoy escribiendo esta nota me informaron que mi moto estaría en la comisaria, pero lo Cortez no quita lo valiente, esto que relato es lo que me sucedió, y lo que paso ni una coma más ni menos, independientemente del hallazgo de mi moto y eso quiero de la policía, que me dé respuesta como vecino, repito a cualquier hijo de vecino y agradezco el hallazgo de ser cierto.