columna especializada.

Le damos la bienvenida a la Dra. Laura Vega, Doctora especialista en abdominoplastia, quien colaborara con este medio con columnas relacionada a la estética medicinal, en esta oportunidad hablara de 3 consejos para deshacerse de la hinchazón asociada con una abdominoplastia.

Queríamos agradecer a la doctora que se intereso en colaborar con este medio desde Barcelona, quien colaborara con diferentes concejos a través de estas columnas.

Cuando se realiza una cirugía estética abdominal, por lo general desea poder ver los resultados rápidamente. Es así como rápidamente podemos sentirnos desanimados al ver pasar los días y la hinchazón asociada a la intervención nos impide apreciar el tan esperado cambio de apariencia.

Es perfectamente normal querer mejorarse y sentirse bien con su propia imagen. También es normal sentirse molesto por los efectos secundarios inherentes a cualquier tipo de procedimiento de cirugía estética. Nadie quiere operarse y tiene que esperar semanas para que desaparezcan los hematomas y la hinchazón asociados con la operación. Los pacientes quieren beneficiarse inmediatamente de los resultados de su intervención, lo que de hecho es casi imposible.

Lo primero que hay que hacer para evitar la frustración durante el postoperatorio es aceptar que estos inconvenientes son parte del proceso de recuperación de la cirugía. Aunque es imposible eliminar por completo estos efectos, es posible reducirlos para que sean menos visibles y perturbadores.

Este es el caso, por ejemplo, en el contexto de una abdominoplastia, una intervención que tiene como objetivo extraer el exceso de grasa y piel de la zona baja y media del abdomen. Una vez que se completa la operación, es normal que el paciente tenga hinchazón en el estómago y hematomas alrededor de la cicatriz. Más allá de una extracción de grasa y piel, se tensan los músculos abdominales lo que provoca una inflamación, cuya recuperación total llevará algún tiempo. Incluso se puede combinar con un tratamiento de botox para reducir la flacidez leve de la zona.

Estos efectos secundarios pueden durar entre 30 y 60 días y, a menudo, hasta tres meses con una abdominoplastia sola. Si el paciente aprovecha esta intervención para recurrir a otros arreglos, este período de recuperación puede entonces alargarse.

Existen otros factores que se pueden tener en cuenta para explicar la hinchazón del abdomen, como el hecho de que el paciente experimente complicaciones durante la operación o postoperatorio, su estado de salud, su edad, su estilo de vida antes de la cirugía, ya sea una abdominoplastia completa o una mini abdominoplastia, la cantidad de grasa y piel que se debe eliminar, etc.

Sin embargo, los pacientes no deben desanimarse por este problema de hinchazón. De hecho, existen algunas soluciones para ayudar a que la hinchazón disminuya más rápidamente. Aquí hay tres consejos a seguir para este propósito.

Siga al pie de la letra las recomendaciones del cirujano

Debido a que queremos poder ver los resultados de nuestra intervención en un mínimo de tiempo, en ocasiones tendemos a no seguir estrictamente todas las recomendaciones de nuestro cirujano y pensar que estamos lo suficientemente recuperados para realizar una actividad. Las consecuencias de esta falta de precauciones pueden ser significativas, desde sangrado hasta problemas de curación a través de la apertura de los puntos. Por eso es fundamental seguir todas las instrucciones de tu cirujano sin olvidar ninguna para recuperarte lo mejor posible.

En el contexto de una abdominoplastia, estas recomendaciones implican, por ejemplo, el uso de una manga de compresión o un vendaje durante al menos un mes. El objetivo de esta funda abdominal es precisamente controlar la hinchazón de la zona tratada a la vez que mejora la circulación en el vientre y mantiene la zona apoyada y estable. Su uso permite una recuperación más rápida y eficiente sin complicaciones posteriores y para resultados mucho mejores.

Sin inmovilidad excesiva hasta la recuperación completa de la abdominoplastia

Todo aquí depende, por supuesto, de la operación de la que estemos hablando. Sin embargo, en general, los médicos le recomiendan que haga ejercicio moderadamente después de unos días después de la cirugía. Estamos hablando de ejercicios como caminar a un ritmo pausado y constante.

Mantenerse en movimiento es fundamental para facilitar el proceso de recuperación. Moverse mejora la circulación y por lo tanto evita la formación de coágulos y complica la recuperación. Por ello, los médicos recomiendan que tras los primeros días de descanso obligatorio, el paciente en Barcelona u otras ciudades reanude progresivamente sus movimientos hasta recuperar la actividad normal. Sin embargo, debe usar su funda abdominal en todas las circunstancias.

El ejercicio en cuestión aquí no debe entenderse como practicar deportes, levantar objetos pesados ​​o incluso agacharse. Por el contrario, estas prácticas deben evitarse para no correr el riesgo de tensar los músculos de la zona tratada. Lo mismo ocurre con la vuelta al trabajo. Una vez finalizado el paro laboral, se podrá retomar la actividad profesional siendo, sin embargo, cuidadoso y desde el momento en que este trabajo no sea incompatible con el proceso de recuperación